«La conexión con la naturaleza, el aprecio a la sencillez, a las cosas que damos por sentado, pero que cuando las piensas y las vives te das cuenta del verdadero valor que tienen. Los sherpas, tal y como explican Xiana y Lapka en su libro, siempre han aplicado estos principios en la superación de un miedo que a veces los occidentales tenemos infundado de base, pero que en realidad no existe. La clave está en mantener un equilibrio entre el gozo, la confianza y la exposición al riesgo».
